En el mundo acelerado de hoy, el estrés y la ansiedad se han convertido en compañeros comunes para muchas personas. El aceite esencial de Ylang-Ylang es conocido por su capacidad para promover la relajación y aliviar el estrés. Los compuestos aromáticos del aceite tienen un efecto calmante sobre la mente y el cuerpo, ayudando a reducir la sensación de tensión y ansiedad.
 La lavanda simboliza frescura, pureza, silencio y calma. Su uso se remonta a siglos atrás y es una de las esencias más relajantes y equilibrantes. Su aceite esencial se utiliza en cosmética natural por sus múltiples beneficios para la piel, por lo que es una planta perfecta para el cuidado de la piel y la salud. Está especialmente recomendado para el tratamiento de pieles acnéicas, sensibles o deshidratadas.
 Los beneficios de la lavanda para la piel incluyen:
 Propiedades calmantes: La lavanda es conocida por sus propiedades calmantes y relajantes. La aplicación de aceite esencial de lavanda en la piel puede ayudar a reducir la irritación, el enrojecimiento, la picazón y la sensación de ardor.
 Acción antiinflamatoria: El aceite esencial de lavanda contiene compuestos que tienen propiedades antiinflamatorias. Esto significa que puede ayudar a reducir la inflamación de la piel, especialmente en casos de dermatitis, eccemas o quemaduras leves.
 Efecto curativo: la lavanda puede estimular la regeneración celular y promover la cicatrización de heridas. Aplicar aceite esencial de lavanda en cortes, quemaduras o abrasiones puede acelerar el proceso de curación y reducir la formación de cicatrices.
 Hidratación: La lavanda también tiene propiedades humectantes, lo que la convierte en un ingrediente ideal para productos para el cuidado de la piel. Puede ayudar a mantener la piel suave, tersa y bien hidratada, especialmente para la piel seca o deshidratada.
 Efecto antiséptico: el aceite esencial de lavanda tiene propiedades antisépticas y antibacterianas, que pueden ayudar a prevenir infecciones de la piel y mantener la piel limpia y libre de bacterias dañinas.
 Relajación y bienestar: Además de sus beneficios para la piel, la lavanda también tiene propiedades relajantes, que pueden contribuir a reducir el estrés y promover una sensación general de bienestar.
 Previene el envejecimiento prematuro y estimula la producción de colágeno: Los antioxidantes presentes en la lavanda ayudan a inhibir la acción de los radicales libres, responsables del daño celular y del envejecimiento prematuro de la piel. Esto ayuda a mantener una apariencia joven y saludable de la piel.